lunes, 13 de agosto de 2012

Crónicas de un viaje.

Y en otras noticias: En el duelo de colores el verde vuelve a tomar la delantera.

Y es que se necesita solo de un segundo, de una frase, de una acción, de una mirada, de un momento, de una lagrima, de un apretón, de una sola cosa para darte cuenta de que no era lo que esperabas y de que no necesitas estar ahí.
Dejarse llevar por una primer impresión siempre sera uno de los errores mas recurrentes del ser humano; creer en cartas, en café o en bolas de cristal no es la mejor manera de hacer una elección.
Los recuerdos siempre atormentaran a las mentes mas débiles y harán mas fuertes las "malas" maneras de entender la vida.
Los descalabros no son siempre en el cráneo y ahora mas que nunca entiendo que el corazón solo funciona para bombear sangre.
 Mentir para esperar un futuro mejor es igual que cerrar los ojos para mirar un mejor presente o querer detener el tiempo en un pasado que ya ni forma tiene.

Arraigar: Hacerse muy firme y difícil de extinguir o extirpar un afecto, virtud, vicio, uso o costumbre.

¿Y que hace no cuando lo arraigado arraigado esta y desarraigarse ya no puede? Pues nada, esperar a que el otro tenga las suficientes ganas de arrancarlo y seguir adelante.

Mi mente tomo una decisión (y aclaro que fue mi mente porque el corazón solo sirve para bombear sangre) y en el duelo de colores el azul se volvió verde y mis ganas de mirarte se me ahogaron en los ojos.

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